En México hay un parque de diversiones en la comunidad de El Alberto, en el estado de Hidalgo, en donde puedes pretender por unas horas ser un inmigrante ilegal tratando de cruzar la frontera a Estados Unidos.
Durante la visita al lugar los turistas experimentan un simulacro de lo que es cruzar la frontera ilegalmente.
El objetivo de la excursión, que dura casi 4 horas y cuesta 20 dólares por persona, es educar sobre los peligros del cruce de la frontera y desalentar la migración.
Durante el viaje participan alrededor de 100 elementos del personal del parque, representando a personajes fronterizos.
Además, cuentan con varias camionetas que se parecen a las de la patrulla fronteriza estadounidense y otras similares a los vehículos de los coyotes o traficantes de personas.
Los supuestos agentes estadounidenses dan instrucciones en inglés, mientras los coyotes guían al turista a través de la maleza.
El parque espera más visitantes si, como se cree, Estados Unidos aumenta la seguridad en la frontera.
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