SOLO QUIERO...

COMPARTIR CON TODOS USTEDES LAS COSAS QUE VOY APRENDIENDO DIA A DIA ... UN ABRAZO

miércoles, 12 de marzo de 2014

Por qué atacan a los médicos en China

Una enfermera quedó paralítica en Nankín, un médico fue degollado en Hebei y otro fue golpeado con un tubo hasta morir en Heilongjiang.
Incidentes separados que en las últimas semanas han tenido lugar en China. Son sorprendentes y salvajes.
El mayor problema es que no se trata de casos aislados, sino de la última crisis de violencia en el corazón del sistema sanitario chino, que está dejando una estela de luto a su paso.
Memorial de Wang YunjieWang Huijiao hace una profunda reverencia envuelta en el humo del incienso a la foto de su hermano muerto. El marco de su imagen se sienta en una silla delante de la cual hay una mesa con frutas y dulces. Bajo la silla hay un par de zapatillas.
Han pasado dos meses desde que el doctor Wang Yunjie fue asesinado, pero la familia todavía no soporta la idea de desmantelar la sala memorial que pusieron en el sótano.
"Nuestro padre no puede dormir", me explica la señora Wang. "La hija de mi hermano no se concentra en sus estudios. Su esposa quedó sola".
"Él era gracioso y amable... y bueno con todo el mundo. Trataba a sus pacientes como a su propia familia", agrega.

Doctores "malos"

Familia de Lian Enqing
La familia de Lian cree que estaba mentalmente enfermo cuando atacó al doctor.
Al doctor Wang lo mataron el 25 de octubre del año pasado, mientras trabajaba en el Hospital del Pueblo No1 en la ciudad de Wenling, en el este de China.
Su asesino, Lian Enqing, de 33 años, caminó hacia su oficina y lo atacó con un martillo y un cuchillo.
En una foto tomada en 2012, Lian aparece contento y jovial. Fue poco después de haberse sometido a una cirugía de nariz en el hospital de Wenling.
Pero asegura que esa cirugía lo dejó con un dolor constante durante todo un año; su vida fue degradando hasta llegar a una profunda tristeza.
Lian Enqing
Lian, de 33 años, asegura que sufría de dolor constante tras la cirugía de nariz.
En su casa de las afueras de Wenling, su madre vacía una gran bolsa de artículos del hogar destruidos por su hijo durante sus ataques de violencia.
"Él es un buen chico", asegura. "Son los doctores quienes son malos".
Su habitación quedó intacta desde el día del asesinato. Ésta ofrece una percepción extraordinaria de la mente de este hombre atormentado por su enfermedad y furioso con el sistema sanitario de China.
La parafernalia médica sigue en su escritorio: las botellas y pastillas, así como los papeles que documentan los dos meses de tratamiento que recibió en el Centro de Salud Mental de Shanghái.
Los especialistas de ese centro lo describen como paranoico y delirante en el documento de la alta médica con fecha del 15 de octubre. Diez días antes del asesinato.
En la pared de su habitación todavía se pueden ver los caracteres chinos que alguien ha intentado borrar, en uno de ellos se lee "muerte" seguido del nombre de dos médicos.
Uno de ellos es el doctor Wang.
La familia de Lian ofrece como explicación de sus acciones la atención de mala calidad que recibió, mas no como una justificación.
No obstante, algunos miembros de la opinión pública sí están preparados a ir más lejos.
Tras la muerte de un doctor en el noreste de China en 2012, el sitio en internet People's Daily hizo una encuesta que ahora ha sido sacada del sitio. En ella pedían a la gente que expresara sus sentimientos.
Más del 60% expresó felicidad por el suceso, mientras que sólo el 6,7% mostró tristeza.

"Ví el asesinato"

En el hospital de Wenling, la recepcionista de la sala donde mataron al doctor Wang dice que es común ver a pacientes que amenazan con violencia.
Doctor Wang Yunjie
El doctor Wang vio como a su colega lo apuñalaban varias veces.
Los legisladores chinos están intentando reformar el sistema ampliando el acceso a los seguros sociales y expandiendo la cobertura.
Pero no está sucediendo lo suficientemente rápido, y la insatisfacción de los pacientes está creciendo ante las costosas tarifas y reclamos de negligencia y corrupción.
En esa sala encontré al doctor Wang Wiejie, colega del doctor Wang Yunjie, en su consultorio atendiendo a pacientes. Él estaba aquí el día del asesinato y cuenta que trató intervenir.
"Vi cómo el asesino apuñalaba a Wang unas dos o tres veces", cuenta. "Me di cuenta que si lo acuchillaba una vez más, entonces sería una muerte segura".
"Así que le agarré la mano y vi el cuchillo de unos 35cm de largo, y me apuñaló en el pecho. Después volvió a acuchillar a Wang y cayó al suelo".
En la puerta del hospital ahora hay un nuevo puesto de policía, pero los hospitales públicos son por naturaleza públicos, y aquí parece ser poco lo que pueden hacer las autoridades.
Tanto las familias de Wang como las de Lian Enqing tienen una sensación de injusticia.
La familia de Lian cree que, como se muestra en su historial médico -pero contrario a la sentencia de la corte- estaba mentalmente enfermo en el momento del ataque. Por eso están apelando contra la sentencia de muerte.
La familia del doctor Wang está molesta por la forma en que se ha retratado al asesino tanto en la corte como en la prensa china. Ellos creen que esto no fue una simple disputa doctor-paciente.
Wang ni siquiera fue el cirujano de Lian, aseguran, sino que sencillamente estaba intentando mediar.
Los familiares del doctor cuentan que el hospital limitó el número de colegas que podían asistir al funeral después de que el personal participara en una manifestación en la zona del hospital exigiendo más protección.
"En el hospital nos dijeron que cada día va gente a amenazar con cuchillos", dice la hermana de Wang, Wang Huijiao.
"Mi hermano murió por el sistema médico. Murió porque el sistema está roto".

No hay comentarios: