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miércoles, 23 de enero de 2013

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PENSAMIENTO  DESHUMANIZADO...




¡ PROPONE MUERTE A LOS  VIEJOS !


Taro Aso, ministro japonés de Finanzas, tiene púas en la lengua. El lunes invitó a las personas mayores a que se den «prisa y morir». La petición tiene raíces económicas: con su «desaparición» se reducirían los gastos del Estado destinados a su atención médica. No se sabe si el propio Aso se considera un potencial candidato a tomar tan drástica medida, pues tiene 72 años. Sus palabras han caído como una bomba en un país donde el 25% de la población pasa de los 60 años.
El ministro nipón del nuevo Gobierno de Shinzo Abe, quizá demasiado obsesionado por llevar la austeridad al extremo, aprovechó una reunión del Consejo Nacional sobre la Reforma de la Seguridad Social para cargar con dureza contra las tácticas de reanimación y los tratamientos para prolongar la vida. «Dios no quiera que ustedes se vean obligados a vivir cuando quieran morir. Yo me despertaría sintiéndome mal sabiendo que todo el tratamiento está pagado por el Gobierno», relata el periódico británico «The Guardian».

Aso definió a los ancianos que ya no pueden alimentarse por sí mismos como «gente de tubo». «El problema no se resolverá a menos que ustedes se den prisa en morir», concluyó. Aso subrayó que el Ministerio de Salud y Bienestar es «muy consciente de que cuesta varias decenas de millones de yenes» al mes el tratamiento de un solo paciente en las etapas últimas de la vida.
Poco después, Aso, que también es viceprimer ministro, dio marcha atrás y admitió que sus palabras habían sido cualquier cosa menos apropiadas. «Inadecuadas», dijo, y más en un foro público, para matizar que estaba dando su opinión personal. «Es importante que la gente pueda pasar los últimos días de su vida en paz», concluyó. «Dije lo que personalmente creo, no cómo el sistema de atención médica para los últimos años de vida debería ser», afirmó.
Aso es especialista en meter la gamba. Cuando era primer ministro, en 2008 llamó «chochos» a los pensionistas. Y en un encuentro con economistas soltó: «Veo a gente de 67 años o 68 constantemente ir al médico. ¿Por qué tengo que pagar por las personas que sólo comen y beben y no hacen ningún esfuerzo? Yo ando todos los días y hago otras cosas, pero yo voy a pagar más impuestos».
Una cuarta parte de los 128 millones de habitantes de Japón tienen más de 60 años, lo que lo convierte en el país más envejecido del mundo. Dentro de medio siglo el 40% de la población tendrá edades avanzadas, lo que obligará al Gobierno a aumentar los gastos en pensiones y sanidad. En un 40% de los hogares japoneses con asistencia social hay algún miembro mayor de 65 años. Y el número de mayores que viven solos se incrementa sin cesar. En 2010, 4,6 millones de personas mayores vivían solos, y la cifra de los japoneses que murieron en el hogar se incrementó un 61% entre 2003 y 2010. Esa proporción aumentará hasta el 40% en los próximos 50 años, según los cálculos de los expertos en la materia.
Taro Aso nació en Iizuka, Fukuoka, en 1940. Su padre, Takakichi Aso, fue presidente de la Aso Cement Company y aliado del primer ministro Kakuei Tanaka. Su madre fue hija del primer ministro Shigeru Yoshida. Preside el Partido Liberal Democrático y ha pertenecido a la Cámara de Representantes desde 1979. Fue ministro de Relaciones Exteriores entre 2005 y 2007.

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