El 30 de mayo fue el Día Mundial de la Esclerosis Múltiple (EM), una iniciativa de la Federación Internacional de Esclerosis Múltiple que se conmemora en simultáneo en más de 83 países como una oportunidad para generar conciencia de la enfermedad y fortalecer la red de personas que viven con EM en el mundo.
La EM es una enfermedad autoinmune. En este grupo de enfermedades, el sistema de defensas del cuerpo erróneamente lesiona partes propias en lugar de sólo atacar a los organismos externos como pueden ser virus o bacterias.
En EM se produce una agresión del sistema nervioso central (cerebro, medula y nervios ópticos), por parte de nuestro sistema inmunológico. Esta enfermedad afecta a gente joven y por lo tanto en edad económica y socialmente activa.
El doctor Vladimiro Sinay, jefe de la Clínica de Esclerosis Múltiple y Cognición, de INECO explica cómo se está avanzando en el estudio de la cognición aplicada a esta enfermedad: “La cognición social evalúa las funciones mentales superiores en el contexto de la interacción con nuestros convivientes. Una alteración de la misma genera una dificultad en el desempeño laboral y en las relaciones humanas en general”.
En el último congreso de la Academia Americana de Neurología realizado en Nueva Orleans del 22 al 28 de abril de 2012 se presentaron novedades muy importantes al respecto. “Con el equipo de investigación de la Fundación INECO evaluamos la respuesta de los pacientes con esclerosis múltiple ante distintos dilemas morales con resoluciones emotivas o utilitaristas. Por ejemplo, cómo reaccionaría frente a una situación hipotética en la que uno debiera sacrificar a una persona con el único objetivo de salvar a otras cinco en la que puede que prevalezca la emoción o la razón”, expuso Sinay. “Si prevalece el proceso cognitivo, el resultado es utilitario: dañar al menor número de gente, en cambio, si prevalece el proceso emotivo el individuo prefiere evitar el daño directo”.
A partir de estos datos, Sinay sostuvo que estos pacientes pueden presentar fallas en la forma en que perciben lo inapropiado de los dilemas personales en los cuales se debe actuar de forma activa para evitar un daño mayor, pero con un mayor impacto emotivo.
“La importancia de estos hallazgos radica en la comprensión de la dificultad de la interacción social generada por esta dolencia y la necesidad imperiosa de mejorar las estrategias de rehabilitación y estimulación para evitar un handicap negativo en las relaciones laborales o personales”, concluyó el especialista.
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